ACB: El quinto partido era inevitable

El 99% de los madridistas sabíamos que salvo que ocurriera un milagro el miércoles habría quinto partido y así fue. Es casi imposible luchar contra los elementos y pese a que el equipo jugó francamente mal y sobretodo con mucha menor intensidad que su rival, viéndose reflejado esto último en los numerosos rebotes de ataque que cogieron los azulgrana, el Madrid tuvo opciones de ganar hasta que el arbitraje, caserísimo todo el encuentro, decidió dar un último giro a la tuerca para acabar de desquiciar a los jugadores blancos con una pérdida clamorosa de Tomic que pese a estar el árbitro de manera frontal a la jugada y a escasos centímetros de ella, la apreció al contrario de como era realmente concediendo posesión a los catalanes. Jugada para la polémica dicen algunos periódicos, pero qué polémica va a existir cuando la jugada es tan clara!!!!!. Además si hubiese sido solo esa la jugada polémica el Madrid hubiese ganado de calle, baste recordar la penetración de Draper en un contraataque frenado claramente con falta en defensa que se fue al limbo, como en el limbo estaba el pésimo realizador y su equipo de cámaras para poner una repetición de la jugada. Eso sí, para otras acciones en las que era posible que el jugador blaugrana fallase debido a una falta no pitada, bien que la repetían, auténticamente lamentable toda la retransmisión de la final.

Para el quinto encuentro el Madrid tendrá que darle fuerte a Tomic, en ataque dada la baja casi segura de Navarro (aunque en la segunda parte no descarto que juegue) seguro que el pívot croata asumirá el protagonismo al menos en los primeros minutos, luego estarán Oleson y Huertas, sobretodo al base hay que desquiciarle y provocar que cometa errores en ataque por precipitación. Esperemos que los primeros triples que se jueguen Ingles y Wallace no entren para que no cojan confianza  porque seguro que ambos tienen más minutos que ayer y se lanzan más tiros ante la baja de Navarro, y es que ayer sumaron solo 2 puntos entre los dos. Poco más tiene el Barcelona en ataque salvo el griego Mavrokefalidis que con algo de fortuna pero suma puntos muy valiosos para su equipo.

En el Madrid, es fundamental que entren los triples, Carroll y Rudy deberían de aparecer de una santa vez y sobretodo mucha defensa y tratar de correr lo máximo posible tratando de no caer en el juego anodino del Barcelona que ayer consiguió dejar a los blancos en un paupérrimo 62 puntos en su casillero de anotación. Para poder correr Begic y Mirotic que saldran nuevamente de titulares deben de ponerse las pilas y poner mucha más intensidad de la que han puesto en la final, con la ayuda del Palacio el Real Madrid debería sacar unos puntos de ventaja al inicio del choque que luego podrían ser decisivos para el resultado final.

Aunque los catalanes quieran traspasar toda la presión a los de Laso, por algo todos los equipos querrían acabar primeros en la liga regular, y es que jugar el quinto y decisivo partido en el Palacio da un plus de energía a los jugadores que seguro que no desaprovechan. Yo estoy completamente seguro de que Felipe Reyes levantará la copa de la liga y también el trofeo al MVP de la final, como lo de ayer es algo que es imposible de evitar.